“Por aquel tiempo se produjo un alboroto no pequeño por motivo del Camino.” Hechos 19:23 LBLA

Los discípulos del principio de la iglesia fueron conocidos como “Los del Camino” antes de ser llamados cristianos, ¿por qué? Por que tenían bien claro que no había otro medio para llegar a Dios, el Padre, y obtener la vida eterna que Jesucristo. 

Su mensaje era fuerte y claro, lleno de celo, solo hay un camino, como Jesucristo mismo lo había declarado:

“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.” Juan 14:6 LBLA

Y esta verdad era su brújula, su guía, su motor diario, su mensaje por el cual estaban dispuestos incluso a dar su vida. El libro de los hechos dice que se hizo un gran alboroto por causa del Camino, pues las falsas doctrinas y los cultos a ídolos y falsos dioses eran confrontados con la realidad de un solo camino, y la iglesia de aquellos días no rehusó defender su convicción en eso.

Muchos caminos llevan a Roma, dicta el dicho popular, y si emparentamos a roma con la perdición, la destrucción la maldad y la condenación, cierto es qué hay muchos caminos, pero para la Paz, el gozo, el perdón, la justificación, la transformación de vida y la misma vida eterna, la iglesia sabe bien que solo hay uno.