"Y mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.” Filipenses 4:19_

Sin duda una preocupación humana y natural es la provisión de todas las cosas que nos son necesarias, Dios también sabe esto. Fue Él mismo quien instruyó a Adán para trabajar y por el fruto de su trabajo comer. 

Y cuando la nube de la incertidumbre laboral, las caídas de los negocios, la mala administración o las crisis financieras en las naciones nos afectan, se hace necesario activar nuestra fe y confianza en Dios, para que nuestra fe no decaiga ni esté basada en lo que tenemos o no tenemos, sino en Dios que es nuestra esperanza y salvación.

Es importante, primero, no desesperarse, luego, ser agradecido con lo que se tiene en vez de preocuparse por lo que no se tiene, darle la gloria a Dios declarando que Él sabe lo que es mejor para nosotros, descansar en que nuestro Señor es capaz de darnos lo que necesitamos y, finalmente, confiar en que él dirigirá nuestros pasos en nuestros negocios o trabajos.

Sin duda el mundo está temblando ante la incertidumbre financiera, pero la iglesia confía y descansa en que, aunque en el mundo haya crisis, nosotros estamos en Cristo, quien nos dará el pan suficiente para cada día de tal manera que podamos declarar llenos de satisfacción y confianza las palabras dichas por el apóstol Pablo:

“Y si tenemos qué comer y con qué cubrirnos, con eso estaremos contentos.” 1 Timoteo 6:8